miércoles, 7 de abril de 2010

PREMONICIÓN

Ya puede adquirirse Premonición, trece nuevos relatos publicados en la colección Umbral de la editorial sevillana Paréntesis.
Que lo disfrutéis.

lunes, 29 de marzo de 2010

Pink Glove Dance

Una buena amiga me remite vía e-mail el enlace a este video. Me ha parecido una iniciativa que demuestra que lo serio puede resultar simpático.



Casi todos los empleados del Providence St. Vincent Medical Center de Portland, Oregon, participan en este video clip, bailando con guantes color rosa, con el objeto de llamar la atención en la prevención del cáncer de mama. No se trata de recabar donativos, lo único que piden es que el video se vea hasta el final para que quede constancia de la visita (si se ve hasta la mitad parece que no cuenta, es sólo minuto y medio). Cuando el número de visitas llegue a un número concreto, la empresa Medline (la cual tiene una fundación para la prevención del cáncer de mama) hará una donación al hospital con la que se podrán realizar mamografías de forma gratuita a la gente de la comunidad que lo solicite.

viernes, 26 de marzo de 2010

Nuevo libro en breve

Entre los próximos títulos que la editorial Paréntesis anuncia, se encuentra mi tercer libro de relatos, titulado Premonición, en el que he reunido trece nuevas historias escritas entre el 2005 y el 2009.

En breve publicaré más información sobre el libro.

miércoles, 24 de marzo de 2010

Banda sonora (y XIX)



Yo le he dicho que de Auster conozco la trilogía y algún que otro libro. “Invención de la soledad”, “Leviatan”, y un ensayo sobre “Hambre” de Knut Hamsun.
—“El arte del hambre”
Pero esto ha sido mucho antes de que se me ocurra escribir sobre él, en el Backstage, un garito recién abierto no muy lejos de su casa, a unas cinco o seis manzanas. Es uno más entre tantos locales pretenciosos que aspiran a un ambiente personal con una decoración ridícula y un soul de ese que llaman elegante, del tipo Sade y otras mierdas parecidas.
—Esto es un quiero y no puedo —le he dicho a Gregorio, observando con desdén todo lo que nos rodea.
Según parece nos encontramos en mitad de lo que es un escenario. Al fondo hay un pequeño rincón que simula los camerinos, desde donde se accede a un retrete unisex. Puedes estar meando mientras una tía se empolva por la nariz frente al espejo y escucha tu chorro salpicando contra el fondo del inodoro. Lo más. En el techo, sobre la barra, destaca un varal desproporcionado del que penden cuatro focos apagados y cuelgan cuerdas mal tensadas a los pescantes que sobresalen de la pared. La iluminación es escasa. No podía ser de otra manera, para que todos los gatos sean pardos, ya puestos. La llama de una vela roja incrustada en una tulipa de cristal titila sobre cada una de las mesas. Eso es todo.

(De “Conozco un atajo que te levará al infierno”, página 175)

viernes, 19 de marzo de 2010

Un relato PARAFÍLICO



José Antonio López, director de la colección Vagamundos (Ediciones Traspiés), está preparando una antología de microrelatos ilustrados, cuyo hilo conductor es la parafilia.

De momento, a través del blog que ha creado de forma paralela al proyecto, se encarga de difundir los textos (pincha aquí para leer el mío) e ilustraciones que va reuniendo, tanto del libro como aquellas que no puedan entrar en el mismo, y se informa de todas las noticias de interés relacionadas con el tema.
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Goya. Saturno devorando a un hijo 1820 - 1823
Pintura mural pasada a lienzo. 1,46 x 0,83
Museo del Prado, Madrid.




lunes, 15 de marzo de 2010

Reseña en "Cuadernos del sur"

El crítico literario Pedro M. Domene reseñó el pasado sábado,13 de marzo, mi libro Conozco un atajo que te llevará al infierno para Cuadernos del sur, suplemento cultural de Diario Córdoba. (Para leerla pinchad sobre la imagen)

viernes, 12 de marzo de 2010

miércoles, 10 de marzo de 2010

Reseña en YMÁLAGA.COM


El periódico digital YMÁLAGA.COM publica hoy una reseña sobre mi libro Conozco un atajo que te llevará al infierno.

Se puede leer pinchando aquí.

martes, 16 de febrero de 2010

Banda sonora (VIII)

El teléfono está sonando cuando abro la puerta de casa. Oigo un par de timbrazos mientras dejo las llaves y un puñado de monedas en el vacía bolsillos que hay sobre el mueble de la entrada.
— ¿Lo coges tú?—Alejandra grita desde el cuarto de baño—, ¿Andrés?
— ¿Si?
También oigo música en el salón comedor. Escucho durante unos segundos y reconozco uno de los temas que Michael Nyman compuso para la banda sonora de The Cook, the thief, his wife and her lover.
—Contesta tú, yo no puedo salir ahora.

(De “Conozco un atajo que te levará al infierno”, página 159)

sábado, 13 de febrero de 2010

Y dale con los funcionarios, y los gilipollas

Decía yo en la entrada anterior que la clase política en general suele desprestigiar a los funcionarios cada vez que le interesa manipular a la opinión pública, y de paso considerarla gilipollas. Poco han tardado en esta ocasión, en El País de hoy puede leerse un artículo a doble página (“Fijo para siempre, pero ¿inamovible?” es el título) que en principio podría haber servido para analizar un pelín a fondo la cuestión del empleado público en España, pero que se queda en un quiero y no puedo. El artículo en cuestión rebosa medias verdades, suministrando datos que a simple vista parecen escandalosos y que a cualquier lector le llevará a pedir la cabeza de cada uno de los funcionarios de este país, pero que realmente no son más que referencias tendenciosas que carecen del espíritu de suministrar información al ciudadano.

Muy al principio, el autor del artículo ya nos dice que “En el reino del empleo temporal, del ERE y la congelación salarial, ¿por qué el funcionario tiene trabajo fijo y hasta le suben el sueldo?” Pero qué subida de sueldo ni subida de sueldo, por favor. Actualmente se está negociando entre la patronal y los sindicatos de este país subidas salariales en la empresa privada de hasta el 1% en 2010, entre el 1% y el 2% para el 2011, y entre el 1’5% y el 2’5% en 2010, cuando los funcionarios han experimentado una subida del 0’3% en su salario, cantidad que, o bien no se ha reflejado en un incremento del neto que mensualmente se percibe, o bien ha supuesto una merma en dicha cantidad, ya dependa del tramo tributario en el que se ha quedado el trabajador en cuestión. La pregunta a formular debería ser: ¿Pero es que cualquier trabajador español merece que se le actualice el sueldo y los funcionarios no, únicamente por serlo? ¿Pero es que estamos idiotas o qué? No se puede plantear que el empleo fijo es contrario a la actualización salarial ¿Cuántos trabajadores tiene contrato indefinido? ¿Merecen éstos actualización salarial o no la merecen por estar fijos?
Se nos dice más adelante que “Mientras los países de la Unión Europea recortan funcionarios, España los aumenta (un 32% entre 2000 y 2008)”. Dicho así supone un nuevo agravio, volvamos a exigir la cabeza de todo funcionario que asome el morro. No obstante, si se explica que en España hay un funcionario por cada 15 habitantes, en Italia 1 por cada 17, en Alemania 1 por cada 18, en Reino Unido 1 por cada 22, en Francia y Bélgica 1 por cada 12 (más que en España), en Irlanda 1 por cada 13 (más que en España), en Portugal 1 por cada 14 (más que en España), en Suecia uno por cada 8 (más que en España), si se facilitan todos los datos, el análisis que puede enfocarse ya no será desde la posición inamovible de que son demasiados funcionarios, sino desde la pregunta de cuántos funcionarios son necesarios. O es que ¿no son necesarios? Si el empleado público no es necesario para gestionar un país por qué lo es el político.

En el párrafo siguiente se añade: "A las ocho de la mañana, una persona ficha por todos, y a las tres, otra hace lo mismo. No se trabaja ni cuatro horas al día. Se puede verificar muy fácilmente pues todos los fichajes se hacen en el mismo ordenador". Aunque se abusa del tópico (tópico que ya fatiga, la verdad. ¿No hay otro?), esa parece ser la opinión del secretario sustituto del Juzgado número 1 de El Ejido (Almería). ¿Secretario sustituto? ¿Y a la opinión personal y anecdótica de un secretario sustituto se le otorga suficiente credibilidad para engrosar el cuerpo del articulillo de marras? Si a más de un funcionario de carrera preguntaran, seguro que la respuesta no se alejaría mucho de que los sustitutos y los interinos no son más que salva patrias con escasa formación profesional (escasa formación por decirlo suave) y demasiadas deudas adquiridas con quien los “coloca”, trabajadores que por su propia situación de provisionalidad se caracterizan por un servilismo que poco beneficia ni a la administración pública ni al administrado, ya que esa provisionalidad los distancia de la perspectiva objetiva y neutral que debe regir los actos profesionales de un funcionario público, y los acerca al clientelismo, que en definitiva es hacia donde lamentablemente se tiende en la administración pública española en los últimos tiempos.

Casi al final encontramos la siguiente reflexión: “Mientras en los países anglosajones cuesta atraer a la juventud al funcionariado, en España se hace cola. "Da pena que el objetivo del universitario sea sacarse una oposición", se lamenta Mario González. "Es una situación racional, por supuesto, porque te da empleo fijo de por vida y aumentos salariales del 2%, pero mata el espíritu emprendedor de un país, que es lo que hace progresar a la sociedad". La causalidad está servida. La bobada también, repito. Como ser funcionario te proporciona empleo fijo de por vida y subida salarial cada año, todo el mundo quiere ser funcionario. Qué risa, María Luisa. Opino que es todo lo contrario a la simpleza anterior; deberíamos considerar sintomático que en una zona como Cataluña, de las más industrializadas del país, se tenga más dificultades que en Extremadura, por ejemplo, para atraer trabajadores a la empresa pública. No será más acertado pensar que como España es un país deficiente en industria privada, todo aquel que quiera formar parte del mercado laboral carece de alternativas a la administración pública.

Ay, estoy cansado, muy cansado he escrito esto de tirón. Sé que da para más, mucho más, pero sigo pensando que somos gilipollas, todos, sí, gilipollas, al menos es lo que deben pensar los políticos, visto como nos tratan.